Bueno, parece que más bien se dedicaba a la oratoria, pero sí era un "pagano" que se cristianizó. Probablemente su vida se fue "adornando" en la leyenda negra durantr la Edad Media: pagano = satanista y a partir de ahí brujo total. Por eso a determinados grimorios mágicos (creo que ya por el siglo XIV o XV) se le ponía su nombre para conferirle autoridad; las creencias mágicas y religiosas de la gente suelen estar mezcladas, así que estos grimorios a veces mezclaban cristianismo, paganismo y demonolatría. Dí con Cipriano cuando leía cosas de brujería para documentarme de cara a lo que escribí de caos en tierras malkionitas.
El trozo que cité en mi artículo para el grimorio de Borin fue
"Emperador [...], príncipe y señor de los espíritus rebeldes, te ruego dejes tu mansión en cualquier parte del mundo que sea, para que vengas a hablarme. Te mando conjuro de parte del gran Dios vivo [...], a que vayas sin hacer ruido alguno ni exhalar ningún mal olor, para responderme en alta e inteligible voz, artículo por artículo, acerca de lo que te preguntase, sin que te apremie a ello el poder del gran [...] y todos los otros espíritus superiores, mal que te pese. Venid Subintillor, Lucífugo o seas eternamente atormentado por la fuerza grande de esta varita fulminante in súbito."
No dejé los trozos en blanco por ninguna razón ocultista o cabalística, sino porque algunos nombres eran totalmente terrestres y no me encajarían en Glorantha. Creo recordar que detrás de "gran Dios vivo" había toda una plétora de invocaciones cristianas.
El fenómeno no es aislado y parece reproducirse en algunos cultos de santería del Caribe, que mezclan iconografía cristiana con las religiones tradicionales, y creo recordar que mezclaban también con demonios (por influencia cristiana, ya que en muchas ocasiones se ha considerado demoníaco el paganismo).
No era un demonio, sino un hombre excepcional, bien ateo el Che Guevara y en algunos lugares de Latinoamérica los campesinos católicos lo veneran como un santo, con velas y todo, o eso vi en un documental.
Mi madre estuvo de médico en Guinea-Bissau y el jefe musulmán de una tribu le enseñó con mucho orgullo los ídolos de su comunidad. En otro lugar, todos los miembros de la tribu (cristianos, animistas y musulmanes) participaban en los sacrificios que se realizaban a su árbol sagrado, eso sí, sólo los animistas podían ser jefes, porque el jefe era el que dirigía los sacrificios.
En fin, son sólo ejemplos, al fin y al cabo de lo que quería decir. Que las cosas no son tan sencillas como los estereotipos mandan.
Saludos,
Antonio
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