> El Servicio Secreto imperial se llama "La Palabra Pronunciada"
> (aquí tuve un malentendido con el chiste de los autores oficiales
> refiriéndose a una de sus secciones como "Palabra no
Pronunciada") ;P
También recuerdo una organización que se dedicaba a algo parecido que aparecía en el Genertela. Creo que se llamaba los Visionarios del Plasma. No está muy claro a lo que se dedican pero el nombre es sugerente.
Yo creo que a la hora de reclutar o entrenar asesinos el Imperio recurrirá a donde sea. Y es que el asesinato se considera algo innoble en todas las culturas. Si ya es innoble de por sí, que más da 'mancharse' recurriendo a personajes de la peor calaña. Lo que cuenta es la efectividad y el resultado.
En este caso si el imperio tiene constancia de un asesino de prestigio perteneciente a Krash no creo que le haga ascos. Otros reinos igual tendrían más remilgos, aunque muchas veces la Razón de Estado es la que manda.
También dentro del Imperio habrá multitud de asesinos o espías al servicio de otras fuerzas que no sean el estado: una casa comercial, una determinado culto, una determinada rama de la nobleza local... Todas ellas podrían encontrar motivos para quitar de enmedio a alguien.
> No veo muy claro que los trolls de Annilla sean agentes lunares
> típicos, pero si lo necesitasen para alguna misión excepcional
> y muy secreta podrían recurrir a sus aliados súbditos de Bina Bang.
> (reina de la Meseta de la Luna Azul, que está fuera de sus
fronteras)
> porque se dice que en cuestiones de infiltración no tienen rival...
Algo he leído por ahí de estos trolls, aunque si son expertos en infiltración no serán gracias a su tamaño :-P
>
> PD: Y en estas, como ya he dicho, veo al culto de Phedayla
> como una minoritaria unidad de élite del ejército imperial
> con una historia gloriosa y llena de condecoraciones pero...
> unas funciones hoy bastante restringidas por culpa de estar
> tan orientadas a su efectividad fluvial (estaban muy limitadas).
> Claro que ahora que el Imperio Lunar tiene salida al mar...
Así es. Un culto de glorias pasadas que necesita una renovación... o el resurgir de viejos enemigos nunca se sabe
Waertag
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