Alguien ha propuesto la idea de que si uno obliga a un esp�ritu de
magia a gastar toda su PER en encantamientos para �l, se gana un club
de fans en el otro mundo. A m� me parece bien la idea, pero adem�s no
me parece tan sencillo el asunto:
-Primera l�nea de defensa, la incorporeidad. Para realizar un
encantamiento se tiene que dibujar o extender un hermoso patr�n de
runas, que luego se activan con los puntos de PER. Un esp�ritu de magia
no tiene cuerpo, y como no es un fantasma no tiene deseos de poseer
uno, ni puede hacerlo probablemente (cielos! mi primera l�nea de
defensa est� comprometida por los malditos fantasmas que s� pueden
poseer Y lanzar conjuros...)
-Segunda l�nea de defensa, la habilidad. Para realizar los necesarios
patrones de runas de forma permanente hace falta un m�nimo porcentaje
en la habilidad de fabricaci�n pertinente (un 30% al menos, en Fab.
Tatuajes, o Bronce, o lo que sea). Adem�s hace falta la habilidad de
encantar, que no es tan com�n, y los pringadillos que la tienen la
tienen a un bajo porcentaje. La pregunta es: vas a dejar a un manazas
que toque tu cayado superm�gico, exponi�ndote a una pifia en el
encantamiento que mande tus encantamientos previos a tomar por saco?
Normalmente una pifia provoca como m�nimo la p�rdida de algunos puntos
de PER previamente invertidos, o aumenta la dificultad de posteriores
tiradas de Encantar en el mismo objeto (Por las siete Madres, qu�
chapuza! Lo mejor es tirarlo y empezar desde el principio), pero si el
sujeto es especialmente torpe el m�ster puede inutilizar para siempre
el objeto como atenci�n especial a un jugador tan ambicioso. (Vaya,
inadvertidamente a impuesto una condici�n de uso al objeto... tener 130
a�os de edad) Eso s�, s�lo en caso de pifia. Como las invocaciones.
Ya llegar�...
Hasta pronto
MANOLO