Gracias, gracias, muchas gracias

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Fecha: Tue, 13 Feb 2001 00:58:15 +0000


Pues eso, que muchas gracias a todos los que me habéis felicitado, no me lo esperaba y me siento emocionado, emocionadísssimo.

Por eso, os voy a dar un poco de crítica para fomentar las discusiones:

El otro día me bajé unas REglas de la Casa que no sé de quién son, pero que estaban MUY BIEN, pero... yo creo que hay un pequeño error.

Me refiero a las armas contundentes. En dicho libelo de reglas se dice:

> Cuando un arma contundente impacta sobre una superficie sólida
>como la roca, no recibe más que la mitad del daño normal que
>aplicaríamos sobre cualquier otro tipo de arma. Nunca podrán
>mellarse pues no tienen un filo. Por ello un garrote de trabajo es
>la herramienta ideal para derribar una pared de piedra cementada, ya
>que sus 12 PA no se verían reducidos casi nunca.

De acuerdo con lo de la cabeza, pero no es lo único que puede romperse en un arma o herramienta de este tipo.

 Estas armas, digo, tienen un mango que es de madera, no mucho más grueso que el de una lanza, aunque no tan largo, por lo que no corre tanto riesgo de rotura, pero que actúa de forma diferente, con golpes perpendiculares al mango, que hacen que sufra mucho los golpes que se propinan con ellos (una lanza, en cambio, cuando asesta un golpe fuerte, lo hace en la misma trayectoria que el palo, lo cual beneficia a su resistencia si se usa correctamente) De hecho, una lanza de torneo se utiliza, por ejemplo, con la fuerza de la montura (que a efectos de juego son 3 o 4 D6), mientras que las armas contundentes como los martillos, mazos 2M, picos, hachas, etc, en la realidad se usan con la fuerza del propio peso de la cabeza metálica del arma. Ni siquiera debería aplicársele el mod. de daño a estas armas, porque en la realidad, como digo, no deben usarse aplicándose la fuerza de quien lo utiliza, que simplemente actúa para alzar el arma, ponerlo en movimiento y dirigir el golpe, aprovechando la inercia de su gran peso.

El Davi con cuarto de siglo, que le sienta muy mal, y que ha sido obrero de la construcción (entre otras cosas) y ha roto más de un pico, palas, y mazos a base de picar hormigón haciendo zanjas.

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