Oh, que alegria, que epifania, la hermosa, dulce y piadosa Diosa Roja abre
sus generosos brazos para cobijarnos en ellos y encontrar la paz. Entonces
aprovecharemos para hundirle la Espada de Llama Vibrante de la Ley del
Invisible en su asqueroso vientre que ha engendrado al diabolico Takenagi,
tiraremos hacia arriba para abrirla en canal y echaremos sus putrefactas
entrañas a los perros para mayor gloria del Invisible, el Creador y el Juez
Supremo. !!!DIOS LO QUIERE¡¡¡.
Y a los que quieran un Dios Invisible florero, alla ellos, nosotros
preferimos el Fuego y la Palabra.
Urox, Martillo de Herejes.
P.D: No es oro todo lo que reluce
Ni toda Carmania anda Perdida
El Leon de Bronce rugira de nuevo
Y Carmania tendra de nuevo Rey