RE: [G] Prisiones

Write haof XML files: Jesús Fagúndez Díaz <jfagundez_at_...>
Fecha: Wed, 03 Sep 2003 10:04:47 +0000


Ah� vamos,
  Por cierto, todo esto de fugas, prisoneros y mazmorras me ha   recordado una cosa. �Como arreglais el tema de las prisiones en   mundos magicos?. Yo lo arreglo con barrotes de hierro, espiritus   guardianes y drogas. Si un personaje demuestra ser un hechicero muy   poderoso y no quieren o no pueden matarlo lo tienen siempre atontado   con bebedizos. �que otros metodos se os ocurren?.

  Yo he asumido siempre que las prisiones de Glorantha se bendec�an al Dios de la cultura que te encerraba all� m�s apropiado, de tal manera que las Intervenciones Divinas no funcionan para sacarte (lo del collar me parece una carallada). Adem�s exist�a un conjuro de Guardia sobre las prisiones que respond�a en el momento en que alguien intentaba escapar, por considerar que en ese momento realizaba un acto hostil contra la deidad que consagraba el recinto.

  Con respecto a los hechiceros estos eran maniatados y amordazados (seg�n nuestras reglas caseras cada mano no utilizada baja el porcentaje de los conjuros en 25% y el no hablar en 50%, por lo que un mago prisionero tendr�a -100% a realizar sus hechizos). Para los seguidores de alg�n dios, los focos o cualquier cosa que se parezca ser� retirado.

  La Divina era un problema en Glorantha y lo sigue siendo, tanto por el desconocimiento de otras culturas sobre las cosas que puede conseguir la divina de otras sociedades como por su dif�cil control. Las soluciones f�sicas como las que escribe el vadelino son buenas soluciones, las ejecuciones... tambi�n. Al fin y al cabo, las prisiones son costosas y los presos, o trabajan como esclavos, o son poco �tiles... los derechos b�sicos del hombre no han sido inventados en Glorantha. :)

           Ethaniel

  "Merece la muerte, la merece sin duda. Muchos de los que viven merecen la muerte y algunos de los que mueren merecen la vida. Pero, �puedes devolver la vida? Entonces no te apresures en dispensar la muerte, pues ni el m�s sabio conoce el fin de todos los caminos..."

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