Una solución del dilema sería que los habitantes de Maslo no adoraran a dioses caóticos, sino a dioses crueles y hambrientos de sangre que no fueran caóticos. De este modo a los elfos no les entra la paranoia anticaótica.
Si lo que nos gusta son los dioses caóticos, es dificil que los elfos no se enteren, existen conjuros de detección del Caos, espíritus espúa y los mismos embilys que contacten con humanos se darían cuenta no tardando mucho. En el caso de Onlaks puede quedar muy bien, los humanos adoran al dioses del Caos, mayor motivo para exterminarlos. En Elamle, igual lo que los ata es el famoso Juramento, realizado antes de que los elfos conocieran la terrible verdad, aunque dudo mucho que en ese caso el juramento no fuera pasado por el arco del triunfo élfico.
Esos pueden ser los motivos por que los elfos de Elamle no ataquen, no se me ocurre ninguno mejor. Otra solución sería que a los elfos les importara a quien adoren con tal de que suelten tributo. Eso tildaría a los elfos de lunares, y tampoco se merecen eso ;-P
Waertag
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