No nos olvidemos tampoco de un método mucho menos complicado que todas esas "triangulaciones de posición por medio de agentes de campo usados como baliza" que no siempre son posibles de utilizar por carencia de los mismos o (más comúnmente) por falta de rentabilidad en tiempo debido a los días o semanas de viaje que puede requerir enviar a alguien a determinado sitio para usarlo de "baliza": hablo del simple y a la larga fiable "ensayo y error".
Según mi opinión, un hechicero que quiera proyectar un sentido a un punto concreto y preciso (hablamos de una precisión de metros a distancias de kilómetros, decenas de kilómetros o incluso cientos o miles de kilómetros, no de una proyección a un lugar más cercano al que se tiene línea de visión) empezaría por una proyección visual aproximada basada en sus conocimientos de geografía, su experiencia personal en viajes por la zona en concreto, etc. Se trata de una estimación de distancia, altura y dirección y por tanto se tercia una tirada de Con. del Mundo (Con. de Glorantha), ¿no creeis? :). Entonces "examinaría el entorno" donde ha proyectado la vista para ver su grado de aproximación al punto. Dependiendo del grado de éxito de la tirada de Conocimiento puede haber "clavado" (crítico) la posición, haber "proyectado realmente cerca" (especial) con desviación de unos pocos metros de modo que con una cantidad razonable de asaltos de concentración pueda desplazar la proyección al punto idóneo, o simplemente haber "proyectado en las inmediaciones" (exito simple) lo que pueden ser unos kilómetros de distancia pero suficiente para que el mago pueda saber donde ha proyectado y situar el punto objetivo mirando alrededor y realizar un segundo lanzamiento con precisión (equivalente ya al especial y sin necesidad de una segunda tirada de Con. de Glorantha). Por supuesto un fallo en la tirada de Con. Glorantha le lleva a un sitio que no conoce y desde el cual no puede calcular un segundo lanzamiento más preciso, lo cual puede ser un paraje totalmente desconocido o a cientos de metros bajo tierra o bajo el mar, etc. Los resultados de una pífia quedan a discrección del master, pero lo más apropiado sería una confusión completa, de forma que el mago crea que está donde debería y sin embargo no es así (si es que es posible encajarlo en la situación), con la consiguiente pérdida de tiempo y equívocos a los que puede dar lugar (incluida su intromisión en lugares protegidos y su detección por parte de defensas).
Indudablemente, el lanzar varios conjuros hasta "dar en el blanco"
tiene el inconveniente del gasto de PM y del tiempo de lanzamiento
(que asumiendo el uso de Ceremonia puede ser de horas) y no olvidemos
el tiempo necesario de recuperar PM para un nuevo lanzamiento a menos
que el mago tenga suficientes como para hacer un par de lanzamientos
o tres en el mismo día. Pero lo más probable es que en un día (si el
mago es habil y con suficientes reservas mágicas) o en dos o tres
días (si el mago no es muy capaz y además no tiene demasiadas
reservas mágicas) tenga el conjuro en marcha en el punto deseado.
Y otra cosa que me parece imprescindible es que un hechicero especializado en este tipo de conjuros debe tener anotaciones en oscuros pergaminos de los lanzamientos desde su guarida a determinados lugares de interés, lease el Palacio (donde fisga incesantemente), la Torre de su rival (con el que mantiene un duelo permanente de intrusión/protección), la ciudad vecina (donde espía a la doncella que se empeña en seguir rechazandole a pesar de la reciente muerte de su prometido), el bosque de las afueras (donde tiene una guarida oculta y que él mantiene convenientemente "encantado" para mantener alejados a los curiosos), etc, de forma que lanzar conjuros desde su guarida a todos esos puntos no precisa en absoluto de tirada de Con. de Glorantha para que sea un éxito de localización.
Un ejemplo. A un hechicero conocido por sus poderes de videncia se le
solicita que espie a fondo las defensas del castillo que proteje la
capital del reino enemigo. Aproximarse al castillo en plena guerra
para tener un lanzamiento más económico y fiable no es seguro y ni se
lo plantea, por lo que desde el interior de las fronteras de su
propio reino lanzará un conjuro de proyección visual. Echa mano de
sus mapas, y quizá de sus recuerdos de cuando el era niño y había paz
y viajó con su maestro a aquella ciudad. Supongamos un éxito simple
en Con. Glorantha. Lanza el conjuro y puede ver que no ha calculado
exactamente la distancia, pero desde allí puede ver el Bosque de las
Decepciones, y él sabe que a diez kilómetros al este de ese bosque y
siguiendo el camino se encuentra la capital que busca. Un segundo
lanzamiento con las correcciones apropiadas le podría llevar al
éxito. Quizá tenga que desplazar el punto de proyección unos
centenares de metros hasta alcanzar el lugar exacto... dependiendo de
sus necesidades y de la urgencia, puede darle una duración bastante
mayor al conjuro en previsión de eso o hacer un tercer lanzamiento
(ya con mucha precisión).
Escorpión, aprendiz de brujo...
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