> En definitiva, yo creo que al jugar al rol jugamos a ser el
> personaje que creamos. Si creamos un cazador hsunchen tosco en
> palabras y más burro que un arado, si es que sabe lo que es un
> arado, no le vamos a dar un beneficio a la hora de construir un
> palacio, por más que su jugador sea el nº1 de su promoción en la
> facultad de arquitectura, porque en el juego es un cazador
> hsunchen mas burro que un arado y no el nº1 de la facultad de
> arquitectura de la Universidad de Glamour.
>
> Un saludo
Completa, total y absolutamente de acuerdo con esto.
Yo no suelo usar bonificaciones/penalizaciones por aspectos ajenos a las reglas (es decir, basado en lo que diga el jugador o cómo lo diga) precisamente por eso. Al final terminas primando la mala interpretación del PJ. A mi me desagrada especialmente que el jugador haga que su PJ se comporte como si fuese una copia exacta de él mismo, con sus mismos conocimientos de la vida real. Incluso hablo de conocimientos de aspectos y recovecos de las reglas que tratan de aprovechar sin pensar en que su PJ no tiene tal conocimiento... por ejemplo: por mucho que nos hayamos leído las reglas y sepamos todos lo que es un basilisco y todas sus capacidades, ¿se nos ocurre plantearnos que nuestro personaje puede no conocer tal criatura ni sus capacidades?.
Siguiendo con el ejemplo del basilisco, se trata de una criatura que no tiene por qué ser conocida por una partida de cazadores bárbaros que examinan una vieja torre abandonada que en otro tiempo fue habitada por un hechicero, lugar donde se encuentran con el basilisco. Lo deseable en estos casos por parte del master sería dar una descripción física de la criatura sin nombrarla y añadiendo que sus PJ's no saben ni lo que es, y por parte de los jugadores actuar con sus PJ's como si no conocieran tal criatura ni sus capacidades (si es que de la descripción del master identifican a la criatura). Quizá el master podría hacer una tirada de Cononocimientos apropiada para determinar si lo conocen. Probablemente aún sin conocer sus capacidades la mayoría de los supersticiosos orlanthis sentirían una natural aversión por una criatura de aspecto tan desagradable y con probables conexiones con las pérfidas artes de la hechicería, pero quizá más de uno tendría la reacción de intentar exterminar tal abominación (que de todos modos tampoco aparenta un peligro físico mortal) en lugar de no molestarla mucho y escapar de allí temiendo por su vida.
De todas formas este es quizá uno de los aspectos más difíciles de la buena interpretación en los juegos de rol: abstraerse lo suficiente como para no emplear los conocimientos. Cuántas veces habremos visto PJ's con un 20% en un idioma expresandose por voz de su jugador como un senador exponiendo una argumentación... o un PJ guerrero cuya máxima relación con la magia es ser iniciado de una religión dando muestras del conocimiento de los efectos de mil y un conjuros que un mago enemigo podría tener dispuestos para lanzarle y cómo contrarrestarlos... etc, etc.
Escorpion
Este archivo fue generado por hypermail