mmmmm...
mirad que, despues de tanto tiempo, he conseguido dedicarme a otros
juegos (NO!! AL DUNGEONS NUNCA!!! :) ). Incluso con 7 masters
distintos, las partidas nunca tenían discusiones divinas o
relacionadas con la estructura catolico- cultural de un mundo. Cierto
es que nos ceñimos al juego: el señor de los anillos en la tierra
media con sus limitaciones raciales y culturales... pero pensar en
extremo en la estructura gubernamental y económica, y menos aun en la
religiosa, ya es pasarse un pelín. Casi que no hay que prestar tanta
atención a esas cosas. Yo nunca me acuerdo de cómo actuan los lunares
si se encuentran en las islas orientales o... bueno, yo no se de eso,
asi queprefiero no meter la pata.
Miro el mundo, lugar del mapa donde va a ocurrir la aventura, y
determino por encima el tipo de cultura y desarrollo civil de dicho
lugar, y ya está. Pero a veces ni eso. Total, no nos importa más que
jugar y pasarnoslo bien, no hace falta saberse el credo para
ambientar una partida. Y no digo que haya que olvidar glorantha, ni
mucho menos.
JEJE, ya vuelvo a la carga. Dios, que ganas tenia. Ya me estoy
oliendo la guerra y los mordiscos. ;)
David el Gran Orco FOREVER