> Bien, desde esta perspectiva yo pregunto: ¿El hecho de que saliese
>un nuevo profeta predicando el amor, la paz y el entendimiento, sería
>caótico... si predicase en el Reino de la Guerra? ;)))
(Sigh) [Empiezo a sentirme incomprendido ;-)]
Vamos a ver, un profeta o predicador normalmente parte de una revelación o valores, o patrones culturales determinados, aunque sean de invención propia, recibidos en Búsqueda Heroica o contados por los ángeles. Los principios del Reino de la Guerra no significan nada para él ni siquiera a nivel subconsciente (igual da que sea un tipo de Chalana Arroy que un profeta que ha descubierto un nuevo camino). Su predicación está orientada precisamente a convencer a la gente para que se ajusten a esa realidad ideal que tiene un carácter moralmente normativo para él. ¿Cabe imaginar algo más LEGAL? Su predicación además se basa en amor, paz y entendimiento, conceptos y sentimientos que se encuentran presentes en el mundo, no son nada alien. Sí, también lo son los sacrificios humanos, pero es que la diferencia es que si un orlanthi sacrifica a Hon-Eel no es un acto caótico, si un orlanthi sacrifica a Orlanth sí es un acto caótico.
Por supuesto, la realidad es compleja, ya que el Caos no se encuentra NUNCA en estado puro (porque eso impediría la existencia de la realidad). Por ejemplo, puede haber predicadores caóticos que defiendan en el Reino de la Guerra la compasión y el amor (tipo Nysalor), que no es lo mismo que decir que defender la compasión y el amor en el Reino de la Guerra es caótico (de pronto una Chalana Arroy descubre que es caótica) En este sentido de mixtura, los seres caóticos pueden tener una suerte de "principios morales". Por ejemplo, los Artesanos de AntiMateria pretenden recrear el mundo, pero la diferencia está en que:
Saludos,
Antonio
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