En el sistema que yo pretendo emular, no sólo se podrían lograr "bendiciones" para el ejercicio de una actividad, sino también otras actividades típicas de la magia popular como pequeñas curaciones, mini-exorcismos del mal y esas cosas. Tendría que poner muchos, muchos ejemplos, en caso de que no hiciese conjuros concretos. Ya veré como ;-)
>Cada dios tendría unas habilidades de influencia que podria
>bonificar y tambien tiradas de características específicas.
Esto para mí es un problema -desde mi óptica "simulacionista" de la teurgia pagana-. Está claro que en todas las mitologías los dioses tienen más o menos unas esferas de influencia. Pero también parece claro, que, en el mundo real (menos en Glorantha u otros mundos roleros), la gente difuminaba mucho esas esferas hasta hacerlas en ocasiones poco reconocibles.
Por ejemplo: Amon-Ra es una identificación de Amon, dios del cielo (¡o dios de Tebas!), con Ra, dios del sol, y a su vez se le reconocen en los himnos poderes relacionados con otros aspectos de la vida como llevar el mar a la revuelta, provocar las inundaciones del Nilo y fortalecer a la parturienta para que el niño nazca vivo. Aún así, sigue habiendo esferas de influencia.
Voy entendiendo mejor esa forma de pensamiento, y cuando la entienda bien, a lo mejor le puedo poner reglas ;-)
> el problema. Entre muchos otros, por ejemplo la interacción de la
>fe que se dedica a un panteon y la fe dedicada a un dios concreto
>de ese panteon.
Yo no lo veo de manera tan problemática desde mi "simulacionismo histórico". En las religiones "tradicionales", como decía Paco, en realidad la gente adoraba más bien al panteón al completo, recurriendo al que hiciera falta según el momento, y en Egipcio antiguo existe una palabra que se traduce como Dios, con mayúscula, que se utilizaba para "el dios al que me dirijo ahora, y que es todas las posibilidades de lo divino en este momento". Ahora bien, los panteones son a veces un constructo nuestro y, en Egipto, por ejemplo, se adoraba sobre todo al "dios del lugar" o a los "dioses del lugar", al culto del templo local, que era un "centro del mundo" con su propia cosmología y visión del mundo, que luego se mezcla fácilmente con la de los demás, porque no son religiones "de conversión"; de modo que cuando uno va por otro sitio y ve un templo, rinde devoción tranquilamente a los dioses del lugar, y los identifica con los suyos sin casi problemas. Además, existía la figura del "dios personal", como en Mesopotamia, un dios que podía estar en tu propio nombre y que te daba una especial protección, como un padrino, vamos.
Para concretar un poco, sin pasarme de simulacionista, yo aplicaría la -llamémosle- fe (es una de las razones por las que no me gusta usarla, tenemos demasiada carga cristiana "revelada" ahí, que puede confundirnos) a todas las divinidades de la cultura, con bonificadores o penalizaciones de situación (este no es el Khonshu de mi pueblo, maldita sea ;-), o bien, ¡vaya, precisamente a Isis, pero si es mi diosa preferida! ;-)
En todo caso, tu distinción entre fes podría aplicarla para
Religión oficial egipcia
Magia popular egipcia
Alta Magia egipcia
Religiones cananeas (en su momento había muchos "asiáticos"
Animismo Nubio (si es que tenían animismo)
etc.
En mi entendimiento actual, la religión oficial podría realizar grandes milagros, pero en general muy difícilmente realizables (pongamos, un enfrentamiento en la tabla de resistencia frente a dificultades altas). La Alta Magia podría realizar grandes prodigios, pero necesitaría una enorme dedicación.
Saludos,
Antonio
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