PURGANDUS POOOPULUS !!! ;-))
> Y por eso yo los comparaba con el rollo aquél de si el Reino
> de la Guerra es "la maldad reconcentrada expulsada de Loskalm"
> Ya sabeis que no me gustan esas ideas, no son el tipo de fantasía
> que me atrae y desde luego no van por ahí mis partidas.
Hasta aquí, nada que objetar... Solo insistir en que el "mal
reconcentrado" no sería "mal metafísico, objetivo", sino el mal
desde la perspectiva de Kralorela, en muchas ocasiones hipócrita
porque los peores estarían fuera y dentro vivirían muchos
desgraciados.
> Pero en cualquier caso, parece ilógico desde una perspectiva
> social mundana, de las que compartimos todos, permitir que existan
> núcleos de opositores al régimen en las ciudades, al alcance de tu
> ejército de "guardianes del orden de las cosas"... y no detenerlos!
Primero una pequeña precisión: NO SON NÚCLEOS DE OPOSITORES. Son
núcleos de viciosos e ignorantes, de gente corrupta y maldita, de
despreciados, de exiliados, gente sin clan, sin familia, de
extranjeros no autorizados (por ejemplo los pj's, técnicamente
son "demonios"). Muchos opositores se refugiarán allí, porque no hay
Ley. Porque si la autoridad entra allí se corrompe.
En segundo lugar una larga defensa personal (kiiai). Una cosa es que
no te guste y otra que sea ilógico, porque a mí me gusta y yo no soy
ilógico ;-))
Vamos a ver, razones (no para admitir los Cuatro Vicios en el juego,
sino para que su presencia sea verosímil):
- A lo largo de la historia, tenemos numerosos ejemplos de tabúes
religioso-mágicos seguidos más o menos a rajatabla y que eran
ilógicos o simplemente poco prácticos. Es un tabú irracional,
hombre, pero se sigue haciendo. En Glorantha habrá muchas razones de
éstas, pero también habrá razones religioso-mágicas de consecuencias
REALES.
- Primera razón mágica. Imaginemos que los sabios determinan
mediante su sabiduría adivinatoria la existencia de lugares
malditos, gafes, perniciosos. Quizás lugares donde se desarrollaron
mitos o historias perniciosos para el statu quo. Lugares
contaminados por Hsan Shia cuyo-nombre-sea-maldito, que no podemos
pronunciar sin maldecir supersticiosamente, o lugares contaminados
por Sekever, o cualquier mito vergonzante, o lugares malditos por
fantasmas o demonios. Por el bien del pueblo los sabios prohiben que
la gente se instale allí, y siquiera que toquen con la suela de los
pies su suelo. Por supuesto, basta con prohibir algo para que
alguien se le ocurra hacerlo. Y por supuesto, la poli no puede
entrar si quieren permanecer "puros".
- Segunda razón mágica. La fuerza sagrada de Kralorela se basa en
el culto imperial al Divino Godunya a través de los Loados Exarcas.
Mediante el culto, la gente canaliza sus energías al poder imperial,
identificándose con dragones colectivos representados por los
Exarcas. El culto es por supuesto obligatorio, pero a veces no
conviene que todo el mundo participe, por lo menos los peores, que
corromperían a los dragones pervirtiéndolos blasfemamente con su
impía adoración. Por supuesto, no todos los que participan en el
culto son dignos, y el propio culto los engrandece, pero al menos te
libras de lo peor. Aún así, habrá conspiradores infiltrados en el
culto imperial para molestar, pero en parte los kralorelanos se fían
del viejo paradigma simpático de que "el mal atrae al mal". Mucha
gente que estaría molestando por sistema está simplemente fuera del
invento. Los "malos" kralorelanos son por definición, Ignorantes,
así que muchos de ellos estarían corrompiendo el culto sin
pretenderlo, víctimas de su propia ignorancia, y ahora están fuera.
En segundo lugar, si alguien pretende infiltrarse en el culto, está
más controlado si se intenta hacer algo para saber quién entra y
sale de los Distritos. Porque el malo acabará irremediablemente
yendo al distrito. O eso creen...
- Razón psicológica-social. Ya hemos hablado de lo humana que es la
demonización y los deseos de ponerle nombre al mal y de tenerlo
visible. Primero, para alejar los miedos y sacarlos de uno; Segundo,
porque mediante comparaciones negativas con otros grupos refuerzas
tu identidad social positiva. Tener al lado como comparación
constante el Distrito de los Cuatro Vicios, paradójicamente aumenta
las ansias de perfección de la población y les proporciona
un "Infierno" físico, material y visible que sirva de amenaza y de
castigo. "Niño, si sigues así acabarás como las putas del Distrito
de los Cuatro Vicios", etc. Además tienes chivos expiatorios para
todos los males de la sociedad y los misterios sin resolver "han
sido los judíos que han envenenado el agua"
- Razón social. Y es que los guettos existen por todas partes, lo
que difiere son sus características. Al fin y al cabo, aunque no
tengas Distritos de los Cuatro Vicios, seguro que hay una zona
especialmente sórdida en las ciudades kralorelanas donde se juntan
toda la basura y todos los excluidos de la sociedad perfeccionista
y "honorable". Un sitio donde se producen todo tipo de negocios y
prácticas ilegales con el consentimiento y la tolerancia culpable de
las autoridades (al lado de mi casa, ni más ni menos, está el
Supermercado Provincial de Droga, con peregrinos que vienen de todas
partes, y obviamente todo el mundo lo sabe). El sitio donde acaban
todos los que sobran. El paladín deshonrado por haber cometido
adulterio con la dama de su señor o por haber huido en el campo de
batalla, la que partió para inflingirse un castigo masoquista por un
despecho de amores, el mercader desquiciado por el ansia de riquezas
fáciles, el exiliado de su pueblo por haber matado a su hermano, sin
familia, sin honor, sin posesiones, montones de tongs de bandas
mafiosas, etc.
Si la "policía" entra, nunca acaba con el "mal" de raíz, por
supuesto, en realidad prefieren el laissez faire por corrupción,
soborno, miedo, comodidad, etc. Si entrara alguno sería como
castigo, agentes condenados al pozo y dedicados a sobrevivir como el
resto de los desgraciados habitantes. Un barrio donde los honorables
kralorelanos nunca aceptarían haber siquiera entrado, aunque
elimináramos la superstición mágica.
5) Razón cínica. En el fondo los excluidos del guetto-sin-ley le
hacen falta a la sociedad bienpensante. Un día necesitas contratar
un asesino, o un veneno poderoso, o hacer un pacto caótico con un
terrible demonio. Bien, envías a tu siervo por la noche al Distrito.
Si tu siervo se negara, quedaría deshonrado y tal vez acabara allí
para siempre, para algo te juró fidelidad. El brujo-misterioso
necesita órganos humanos para sus experimentos, ansioso en buscar el
Elixir de la Inmortalidad; envía un espíritu mensajero para el
contacto con los tongs mafiosos. Nadie va a notar la falta de
algunos miserables de la ciudad-sin-ley.
Los bienpensantes no saben cuándo tendrán que recurrir al vicio. Así
que lo dejan estar.
6) Razón estratégica. Cualquier estrategia es discutible, pero no
por ello deja de ser estrategia. Prefiero tener a los malos a la
vista, controlados, en estos muros. Ahora sabemos donde están,
podemos vigilar si salen y lo que hacen. Sé donde están y por donde
van, no están en mi casa ni en un refugio secreto en las montañas.
Están aquí, al alcance de la mano.
Incluso el Gobierno podría tener sacrificados espías, al estilo
bhodisattva de los artistas marciales, que renuncian a la liberación
para enfrentarse a los enemigos del imperio. Tal vez algún tipo
especialmente heroico esté allí escondido para informar al Imperio
de lo que pasa, corrompiendo conscientemente su alma por bien de la
patria, esperando redimir su karma en alguna reencarnación
posterior. La conciencia cíclica del tiempo y la creencia en la
reencarnación facilita este tipo de renuncias.
Huan To
> Yo pensaba para empezar que nunca habían sido humanos, sino una
> Raza Antigua Menor que se oponía a los kralorelanos.
Básicamente son una raza antigua. Básicamente habitan en las lejanas
montañas Shan Shan, o en el Reino de la Ignorancia, o en el
despoblado. Pero algunos humanos, notablemente los mandarines de
Sekever adquieren sus características mágicamente. Como los humanos
caníbales o los hombres-broo.
Saludos,
Antonio