No estoy en contra de lo que planteas... del todo. Creo que sí que se puede establecer esa relación, pero no debe dejarse de lado la inteligencia de la ficha en cuanto a la representación: algo se debe tener en cuenta. Por supuesto, cada uno lo hará como le venga al fresco, y yo, prefiero que implique la capacidad para idear planes, decubrir entuertos, etc.
Respecto a los de las películas: el malo pierde porque se supone que:
a)Los buenos, por muy inteligentes que sean los malos, ellos lo son
más.
b) los planteamientos malvados, por ventajosos que sean en cuanto a
prescindir de los sentimientos y emociones, tienen también un punto
débil (que nunca queda claro, debe de estar relacionado con la
religión o algo así)
c) No venden tanto las películas (ni libros) en que ganan los malos.
Es decir, el guionista (DM) hace ese requiebro argumental para vender
más (que es una historia más interesante que vender menos). ;-)
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