Yo creo que es tan sólo una idea opcional más. En Loskalm han sido creativos, se han enfrentado a sus demonios y les han expulsado creando una sociedad radicalmente distinta, absolutamente idealista... (al menos en su planteamiento inicial) Estos experimentos mágicos a gran escala en Glorantha tienen consecuencias. Matas a un dios e incomunicas Fronela, hundes Britos y te cargas la navegación, te pones a explotar industrialmente los planos heroicos y todos los poderes cósmicos de Glorantha se alían para destruirte. Por tanto una consecuencia de haber "expulsado el mal" es que el mal se "concentra" en el Reino de la Guerra. Luego vienen los sabios que aseguran que es cierto y los guerreros que creen que son tonterías, los que luchan con palabras, con espadas, con dinero, con magia, con vadelinos incluso... Viene la guerra, el conflicto. Y quién tenía razón? Por qué ha aparecido el Reino de la Guerra? No hace falta ni siquiera que el master decida si estas paparruchas son verdad o mentira, basta con que prepare una campaña en la que parezca que sí, pero no quede claro. Con búsquedas heroicas en las que los participantes luchan (o creen luchar) con sus pasiones para dominarlas y vencen (y creen haber fortalecido el reino de la guerra al mismo tiempo que han fortalecido su virtud) o fracasan... y un caballero fracasado, dominado por sus pasiones, dónde puede acabar? De hecho la gracia de la idea no está en decir son los malos, tenemos que unirnos los buenos y acabar con ellos. La gracia de la idea está en que de repente no parece tan fácil acabar con los malos. Si somos mejores que ellos les fortalecemos, si no somos mejores que ellos, qué sentido tiene vencerles? Si no te gusta la idea porque no te inspira aventuras, búsquedas heroicas, dilemas morales... pues deséchala, al menos mientras seas tú el que dirijas la campaña.
Hasta pronto
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