Ambas cosas igualmente atentatorias contra la dignidad humana, no nos equivoquemos. En los ratos libres me dedico a estudiar científicamente la discriminación, que es una de mis líneas de investigación y el mecanismo es exactamente el mismo (solo que unas veces es más políticamente correcto que otras). Obviamente, en cualquier debate es apropiado criticar religiones, ideologías, etc. y vio Dios que era bueno. Pero el problema es que, en lugar de referirse a cosas concretas realizadas por gente concreta se termine por etiquetar a la gente en función de su adscripción -real o presunta- a cualquiera de estas catalogaciones. Que se obligue a los musulmanes a ser machistas, por ejemplo. Dejemos que cada uno decida lo que su religión o irreligión significa. Salvo que decidan que significa algo que no nos guste ;-))
Por ejemplo, una cosa es decir que el judaísmo se ha presentado tradicionalmente como una religión excluyente -en el sentido de que excluye las prácticas religiosas de otro tipo- e incluso decir que te parece mal, y otra tu descripción caricaturesca del judaísmo medieval, que más bien parece una generalización excesivamente simple. Un mito, más que historia. Tanto, que nos crea complicaciones a la hora de conocer la realidad en su complejidad. Las cosas nunca son tan sencillas como nos las pintan los partidarios de los ejes del mal y conspiraciones judeomasónicas varias. Dejemos los alineamientos evil para el D&D.
En cualquier caso, evitemos pasarnos en este sentido, y volvamos al rol...
Saludos,
Antonio
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