A Thu, 24 Jun 2004 11:17:39 +0200, Fagúndez Díaz, Jesús escribió:
> Yo siempre he aplicado que necesitas dicho material para que surja,
> de tal manera que no puedes hacer aparecer una sombra de 7 metros
> cúbicos en pleno desierto. Pero yo lo aplicaba así por una cuestión
> de lógica interna en mis partidas, para que los que controlan
> elementales de un tipo necesiten estar rodeados sobre todo de ese
> elemento y que fuera de él sean casi inofensivos. Pero también para
> ambientar las partidas ya que en la ambientación es más fácil
> describir las acciones de los elementales en situaciones donde
> existe el elemento, si no quedan como algo demasiado contranatura,
> no sé si me explico.
>
> Un saludo,
>
> Ethaniel
Yo sin embargo la aplico al revés, es decir, necesitas el material para invocar, pero una vez invocado puedes sacar al elemento de su ligadura en cualquier ambiente (bueno, una salamandra debajo del agua no). Por ejemplo, una sombra en el desierto será de lo más útil: sácala de su ligadura y haz que te rodee sin tocarte y verás que fresquito vas ;-)). Y una ondina lo mismo: si te quedas sin agua siempre puedes ordenarle que se introduzca en las cantimploras y devolverla al plano espiritual, con lo que la liberas, pero las cantimploras vuelven a estar llenas.
Un Saludete
Raziel
-- mailto:ma.villar_at_...
Este archivo fue generado por hypermail